Ir al contenido principal

HIPERGLUCEMIA Y ACUPUNTURA

Llevas esas pintas de poeta callejero
que tanto gustan a las musarañas.
Las musas arañan por donde arrastras tus huesos
antes de que termine de amanecer.

Corres más que el Sol

por eso tus sonrisas siempre huelen a despedida.
Las alas de tu sombrero se recortan en la noche
como si fueras a echar a volar de un momento a otro.
Sonríes,
y tú sonrisa es un suspiro

en la melancolía de mis fantasmas,
una curva de delirios al viento,
terrones de azúcar que, sin duda, endulzarían incluso a la primavera.

No quiero que me de una hiperglucemia.
Pero me vendrías tan bien en las bajadas de azúcar.

Te escribo de reojo
como si así mi inspiración no tuviera tiempo
de echarte de menos.

Llevas la barba de dos días mal troquelada
y estoy segura de que si te besara
me pincharía con ella
pero dicen que la acupuntura mitiga los dolores
y, precisamente a mí, me vendría muy bien
una buena dosis
de tu remedio natural.

Me da miedo desgastarte a palabras
Pero, quizás tú,
de poeta a pseudopoetisa,
puedas entenderme.

Sírveme una taza de versos
que estoy dispuesta a dejarte de propina
todas las rimas del mundo.

Y si me provocas una hiperglucemia
vas a acabar haciéndome acupuntura con los labios.
VECA

Comentarios

Entradas populares de este blog

Colección de imposibles

A veces nos olvidamos de soñar. Ahora que todo en la vida cuesta dinero, olvidamos que nuestros sueños son lo único que nos pertenece a nosotros solos. Y que somos nosotros, como únicos propietarios quienes podemos compartirlos con cualquiera. Olvidarse de soñar es como apagar el Sol. Es una fomra muy miserable de autodestruirse. Soñar significa que aún estás vivo, que aún no han podido contigo, que te lo han quitado todo, menos las ganas de seguir jugando. Hasta los peones tienen posibilidad de convertirse en reyes y quién te dice a ti que ella no puede ser tu reina. Si se deja de soñar, se deja de luchar. Nadie puede luchar por otra persona eternamente sin recibir algo a cambio. Nadie puede soñar por ti y mucho menos hacer tus sueños realidad. Una partida de ajedrez no se termina cuando se coloca al rey entre la espada y la pared, ni cuando se le deja solo, ni mucho menos cuando pierde a su reina; termina cuando se rinde, cuando prefiere morir a seguir defendiéndose. Si inve...

Y que te haces autofotos colocando los morritos como si fueras un pez

Esta noche está dispuesta a todo. Ha soltado las gafas de sol y los pitillos negros y los ha cambiado por un ajustado y corto vestido. Ha tirado la timidez y los complejos y los ha metido a presión y bajo llave en un antiguo baul que no sabía ni que existía.  Se ha retratado en el espejo sin una pizca de maquillaje y se ha visto rompedora. Ha sonreido como no lo hacía en años. Se ha puesto los tacones más altos sabiendo de antemano que mañana se verá igual de guapa en sudadera y deportivas. Está decidida a ver el mundo con otros ojos y para ello tiene que empezar por si misma.  Ha recogido los pedazos de hombres lobo que va soltando la luna llena y se los ha puesto a modo de amuleto. Ha besado su collar de la suerte suspirando mientras anochecia y ha pedido, no uno, sino siete deseos como los enanitos de aquella princesa Disney. Ha salido a la calle mordiendo el polvo y las heridas para poder ponerse en pie y ahora se siente como nueva mirando casi como si ella sola pudier...

ALAS

Porque avanzo más deprisa andando en círculos entre tus piernas, cuando el mundo es más chiquitito ahí, bajo nuestra manta de amaneceres. Allí, tu risa hace crecer alas. El tiempo más bonito es el que detenemos. Y los besos de película, se ruedan sin cámaras. Porque tienes lunares en forma de sueños que llevan mi firma. Y eso, cariño, ha iluminado muchos nubarrones. Porque cuando ríes, ríe Madrid y se quedan mudos los atardeceres. VECA